guía de telas

La información es orientativa por lo que es necesario consultar la etiqueta de cada artículo.

lavar ropa

Clasificación: trate siempre la ropa de color por separado de la ropa blanca.

Artículos nuevos: los artículos nuevos deben lavarse a baja temperatura antes de su uso. De esta manera se evita una fuerte contracción en anchura y se preserva la elasticidad del tejido. Las prendas de colores nuevos pueden contener exceso de tinte. Por lo tanto, es necesario lavarlos, posiblemente varias veces, separados unos de otros. Para evitar cambios de color, no coloque prendas mojadas una encima de otra.

Símbolos para el correcto cuidado de la ropa de cama: es imprescindible seguir las instrucciones de nuestra etiqueta. La temperatura del baño de lavado es de gran importancia. Debe regularse hasta la temperatura máxima permitida indicada por el símbolo correspondiente.

Cargar la instalación de lavado y la secadora: la proporción entre la ropa seca, medida en kilogramos, y el baño debe corresponder a 1:5, es decir, 5 litros de líquido por 1 kg de ropa.
La relación recomendada entre el volumen de ropa seca y la capacidad del tambor en el sistema de lavado es de 1:10 para ropa plana y de 1:12 para ropa de rizo. En la secadora, sin embargo, es 1:25 para ropa plana y de rizo.
Nunca cargues las lavadoras con demasiada ropa.

Dosificación del detergente: se debe respetar la dosis indicada por el fabricante del detergente en función de la dureza del agua local y del tipo de detergente. En caso de una dosificación insuficiente, se forman depósitos de cal en la ropa que hacen que las prendas sean más duras al tacto, reducen la blancura de las prendas blancas y provocan cambios de color en la ropa de color.

Remojo: Es mucho más difícil quitar las manchas viejas por errores de lavado que las nuevas. Por tanto, se recomienda no olvidar la ropa sucia durante mucho tiempo, sino ponerla en remojo inmediatamente.

Almidonado: para el planchado, la ropa almidonada debe estar bien humedecida y contener una humedad residual aproximada del 25-30%.

Alteraciones de color: para evitar alteraciones de color, la ropa de color debe lavarse exclusivamente con detergente sin lejía y sin adición de lejía. Siguiendo estos consejos conseguirás el máximo brillo del color. La temperatura en caso de suciedad normal debe ser de 60 grados para prendas de colores de puro algodón o mezcla de algodón, pero puede aumentarse hasta 95 grados en caso de suciedad intensa. Recomendamos evitar por completo el uso de cloro y productos de limpieza que contengan cloro. De esta manera, es posible contribuir no sólo a proteger el medio ambiente sino que también alargará la vida útil de los textiles.

como blanquear

Lino y algodón: hay que dejarlos en remojo durante 15 minutos en una solución de 15 ml de lejía y 10 litros de agua fría. Luego deberás enjuagarlos bien y lavarlos normalmente.

Lana: déjala en remojo durante la noche en una solución compuesta por una parte de peróxido de hidrógeno y 8 partes de agua fría. Después, enjuagar y lavar.

Nylon: Remojar la ropa en 90ml de líquido lavavajillas y 45ml de lejía diluida en 5 litros de agua muy caliente. Deje que todo alcance la temperatura ambiente y sumerja los artículos durante al menos 30 minutos.

La idea reciclada: para blanquear de forma ecológica y reciclar una pequeña parte de lo que consumimos en la mesa, es posible añadir al agua de lavado, tanto a mano como en lavadora, una bolsa de lona que contiene cáscaras de huevo trituradas. O utilizar sal gruesa o fina, dejando la prenda en remojo durante 4/5 horas.

Rizo: El tejido de rizo es especialmente absorbente. Cuanta más agua se absorba durante el lavado, mejor será el efecto de esponja. No conviene abusar del suavizante ya que podría formar una película demasiado espesa alrededor de la fibra y reducir su efecto absorbente. La condición para un buen efecto esponja es que el suavizante se distribuya bien en el agua fría del aclarado y que los tejidos queden empapados.

Lavar telas

Encaje: dejar en remojo mucho tiempo, lavar a mano. No escurrir, envolver en una toalla y limpiar suavemente el exceso de agua. Utilice lejía con mucha precaución, dando toquecitos por un momento y luego enjuagando bien.

Tejidos resistentes: se pueden lavar a 60 grados, mientras que para los finos es preferible no superar los 40.

Artículos impresos: es mejor no superar los 40 grados, para mantener los colores inalterados con el tiempo.

Prendas amarillentas: en este caso sólo queda remediarlo con perborato y agua muy caliente (incluso 90 grados para tejidos blancos y robustos, no más de 60 grados para otros). El perborato también borra las manchas viejas, que tienden a reaparecer en los artículos que se dejan en el cajón durante demasiado tiempo.

en la lavadora

Cómo dividir la ropa:

Separa las prendas de colores de las claras.

Procura lavar siempre las prendas blancas solas, porque con una tela amarilla tienden a volverse amarillas, con una roja adquieren un brillo rosado, etc.

Pretrata las manchas con un blanqueador, producto también apto para cuellos y puños de camisas, que de otro modo no quedarían perfectamente limpios.

Voltee los artículos que tienden a desprenderse del revés
Agite bien las alfombras y la ropa que suelta pelusas

Lavar los calcetines por separado para evitar malos olores en el resto de la ropa.

Vacía tus bolsillos, cierra cremalleras y botones, ata cordones y cintas

Coloque la ropa interior o prendas de tela delicadas en una bolsa de malla o funda de almohada.

Comprueba que no te ha faltado ninguna prenda pequeña de color.

Elige el ciclo de lavado correcto y más ecológico: 60 grados está bien para todas las cargas resistentes. Gracias a los detergentes concentrados y mejorados, ya no es necesario lavar a 90 grados.

Para todos los tejidos delicados y para prendas de color u oscuras (sin manchar), 30 grados es más que suficiente.

Para prendas blancas y/o de colores claros, agregue un poco de lejía al cajón del detergente. Será más fácil tenerlas blancas y bien teñidas. Esta operación sólo debe realizarse si tienes un problema real con la ropa muy sucia.

El prelavado se puede evitar fácilmente si la ropa no está muy sucia.

No mezclar productos como blanqueadores, lejías, cloro, etc. Pierden eficacia, dañan los tejidos y pueden desprender vapores tóxicos.

El secado:
Si secas correctamente tu ropa ahorrarás tiempo en el planchado y, en algunos casos, te sorprenderás. De hecho, muchas telas, si están bien colgadas, pueden funcionar sin plancha. En principio es posible colgar todo al revés¹, utilizando el dobladillo como base para fijar las pinzas.
De esta forma el agua que empapa la parte más voluminosa se deslizará hacia abajo, acelerando el secado. No coloque prendas descoloridas juntas ni las cuelgue a la luz solar directa, ya que esto podría manchar y amarillear las telas. Finalmente, cubre el tendedero con una toalla vieja y sin usar. En particular:

• Sábanas: para secarlas rápidamente, cuélgalas por los extremos con muchas clavijas, creando una especie de saco.

• Cortinas: Cuélgalas en la ventana mientras aún estén húmedas. Bastará con cocinarlos al vapor con una caldera para tenerlos perfectamente planchados.

Planchar la ropa:

Manteles: el correcto lavado en lavadora sin centrifugado es la base para un fácil planchado. Después de sacar la prenda de la lavadora, déjala escurrir durante unas decenas de minutos. Los manteles se deben planchar completamente planos y abiertos, sin doblarlos, hasta su total secado. De esta forma no es necesario el vapor, mientras que un poco de almidón en spray al final puede resultar útil, sobre todo para tejidos de algodón. El lino y las mezclas de lino se deben planchar muy húmedos para obtener buenos resultados.

El resto de elementos: sábanas y toallas también pueden estar simplemente húmedos, pero en este caso es necesario el vapor. Todas las prendas deben plancharse del revés para que el tejido no quede brillante y las esponjas queden suaves.

Simbología de etiqueta

Lavado en agua: la bandeja es el símbolo gráfico utilizado para la información relativa al lavado en agua.

El número interior indica la temperatura máxima de lavado expresada en grados centígrados.

La línea colocada debajo de la bandeja indica que la prenda debe ser tratada con algunas precauciones para evitar daños.

La mano dentro de la tina indica que el lavado se debe hacer a mano, que la temperatura máxima es de 40° y la prenda no se debe escurrir.

[ icon:dry-05] La cruz en la bandeja significa que la prenda no tolera el lavado en agua.

Blanqueo : el triángulo es el símbolo del blanqueo con cloro, es decir, con lejía.

La cruz en la tina significa que la prenda no tolera el lavado en agua.

Si el triángulo está tachado significa que la prenda no resiste el tratamiento con cloro.

Planchado: la plancha es el símbolo relativo a la información sobre el planchado.

​ Si aparecen 3 puntos negros, la temperatura máxima de la suela de la plancha se fija en 200° y se debe humedecer el tejido a planchar.

Si aparecen 2 puntos negros, la temperatura máxima se fija en 150° y se debe colocar un paño húmedo entre la suela de la plancha y el tejido a planchar.

Si aparece 1 punto negro, la temperatura máxima se establece en 100° y se debe colocar un paño húmedo entre la suela de la plancha y el tejido a planchar .

​La cruz en la plancha indica que la prenda no tolera el planchado.

Limpieza en seco: el círculo es el símbolo gráfico relativo a la limpieza en seco y los carteles del interior indican el tipo de disolvente adecuado para el tejido.

[icono:dry-42] ​Una A en el círculo indica que la prenda se puede lavar con todos los disolventes que se utilizan normalmente en la limpieza en seco.

Una P en el círculo indica que la prenda se puede lavar usando percloroetileno con procesos normales sin el uso de tricloroetileno.

[ icon:dry-43] Una línea colocada debajo del círculo con la P indica que la prenda se puede lavar usando percloroetileno con procedimientos normales sin el uso de tricloroetileno, limitando la adición de agua y la temperatura de secado.

Una F en el círculo indica que la limpieza en seco debe realizarse con hidrocarburos.

[ icon:dry-44] Una línea colocada debajo del círculo con la F indica que la limpieza en seco debe realizarse con hidrocarburos, limitando la adición de agua y la temperatura de secado.

El círculo tachado con una cruz indica que el artículo no se puede lavar en seco.

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Secado: los símbolos de secado representados por un cuadrado no son obligatorios.

Un círculo insertado en un cuadrado indica que la prenda se puede secar en secadora.

Una cruz en el cuadrado indica que la prenda no se puede secar en secadora.

Un arco en la parte superior del cuadrado indica que la prenda, después de ser hilada, debe colgarse para secarse.

[ icon:dry-29] Tres líneas verticales dentro del cuadrado indican que la prenda debe dejarse secar empapada en agua, es decir, sin haber sido centrifugada.

[ icono:dry-30] Una línea horizontal dentro del cuadrado indica que la prenda debe colocarse a secar sobre una superficie plana.